BURNOUT EN PROFESIONALES DE CUIDADOS INTENSIVOS: UNA MIRADA ANTES Y DESPUÉS DE LA PANDEMIA

Resumen

Introducción: Sensación de agotamiento, cinismo o sentimientos negativos relacionados con el trabajo y la reducida eficacia profesional son las caracterizaciones del síndrome de burnout, que tiene una alta prevalencia entre los profesionales de la salud, siendo aún más susceptibles a los profesionales que tienen una rutina laboral más agotadora en un entorno de UCI. Discusión: El burnout en la clase médica se muestra en ascenso, y los estudios indican que el riesgo y las presentaciones clínicas del síndrome varían según la especialidad y las condiciones a las que está expuesto el profesional, como la carga de trabajo, los aspectos emocionales del paciente y la familia, las tasas de mortalidad, entre otros. Por lo tanto, la medicina de cuidados intensivos recibió especial protagonismo en presencia de agotamiento emocional y físico, un hecho que se agravó enormemente en el momento de la pandemia de COVID-19. Varias características fueron influenciadas en el agotamiento mental, el desequilibrio psicológico y la frustración profesional en relación con el médico intensivo, incluidas las mujeres profesionales, con una mayor prevalencia que los hombres. Se comprobó que existen numerosas repercusiones tanto para la calidad de vida del profesional, como la labilidad emocional y susceptibilidad a otras enfermedades, así como daños en la atención médica, consecuencia del agotamiento del profesional. Conclusión: Teniendo en cuenta todas las repercusiones negativas del Burnout, se destaca que el estrés prolongado que culmina en el agotamiento es un proceso que se puede evitar, desde la diseminación y el conocimiento del síndrome.